sábado, 31 de diciembre de 2011

Adios 2011

Sé que es una tarde como otra cualquiera, el 31 de diciembre no deja de ser un convencionalismo para medir ese pasar inexorable de nuestra existencia. Miro ese último rayo de sol que se filtra por mi ventana y a mi perro siempre mirándome... la vida fluye, mi vida fluye con cada respiración a través de mis venas, mis pulmones, mis sentidos.... me veo en el espejo y me asombro de cómo los años hacen cambiar mi aspecto... y sin embargo ahí estoy yo, en lo más hondo, el niño, adolescente y joven que fui, con todos mis anhelos, ansiedades, alegrias y tristezas acumulados, ahí en lo hondo me reconozco, soy yo, el mismo pero no el mismo. El misterio de la vida. Y en esta despedida del 2011, un único deseo desde mi hondón: que Tú, Señor, seas cada vez más y yo cada vez menos. Tú, mi Roca.

viernes, 30 de diciembre de 2011

Muchas gracias Mr. Scrooge!




Todas las navidades suelo revisionar esta película, me trae recuerdos de mi propia infancia. He querido verla con mis sobrinos para que ellos también la incorporen a sus recuerdos, pero ha sido inposible, ellos prefieren la videoconsola.  Me gusta la historia de Dickens de este avaro reconvertido en un Papá Nöel generoso y alegre que reparte su fortuna entre todos.   Me gusta ese ambiente tétrico del Londres invernal y helado, y me gustan las canciones y la explosiva coreografía final... 

Año Nuevo, Madre de Dios

domingo, 18 de diciembre de 2011

¡Hágase!


Dios en la Creación: "Hágase la luz" Gn 1, 3" 
María en la Anunciación: "Hágase en mí según tu voluntad"  
Son dos momentos clave de la Historia: 
la Creación y la Anunciación.
Dos momentos para la Palabra: 
Palabra de Dios y Palabra de hombre.
Palabras que se encuentran, se unen, en diálogo eterno, 
en correspondencia, en entrega mutua.
La Palabra por la que se crea todo 
y que se hace carne en el seno de María.
Palabra de Vida, de Alegría, de Ternura.
Palabra respetuosa.
Misterio de Amor. 

miércoles, 14 de diciembre de 2011

Poesía San Juan de la Cruz


Poesía San Juan de la Cruz

"Míos son los cielos y mía es la tierra,
mías son las gentes,
los justos son míos, y míos los pecadores;
los ángeles son míos, y la Madre de Dios
y todas las cosas son mías,
y el mismo Dios es mío y para mí,
porque Cristo es mío y todo para mí."
de la Oración del alma enamorada 






Hoy, como ayer, te tuve en mis manos,
al alzarte, por un instante temblé,
y entre las vetas del pan entreví galaxias,
y la luz del Origen, en mis manos,
y mi corazón incrédulo pero entregado,
¿como Tú, Dios mío,
te abajas a mi nada, en mis manos?
Y en mi gesto que te muestra
pensé por un momento
que la eternidad eso era,
ahi, en mis manos.
(mi pequeño homenaje al santico)

lunes, 5 de diciembre de 2011

Inmaculada

Videoclip Inmaculada

Videoclip 3er domingo de Adviento


Puedes bajarte este video con mejor resolución pulsando aquí

A vueltas con los sacrtamentos II

El problema del acceso a los sacramentos se basa en la necesidad de tener una instancia que pueda discernir (aceptando o denegando) las peticiones que se presentan a la Iglesia. En principio es la comunidad cristiana la que debería aceptar qué persona está capacitada para recibir un sacramento, porque el sacramento se recibe en la fe de la comunidad. Normalmente es el cura el que asume esa representatividad de la comunidad y por lo tanto el que tiene que discernir sobre la idoneidad de los catecúmenos. Y ahí está el problema: porque han pasado años, incluso siglos, en los que la exigencia era mínima, bastaba con el deseo de recibir el sacramento para acceder a el. Cualquier exigencia que se pone ahora, choca con la falta de preparación (y a menudo de educación) de aquellos que en su nombre o en el de otros (bautizandos ó comulgantes) piden el sacramento. En una situación todavía heredera de un cristianismo sociológico se hace muy difícil pedir un plan de formación o un proceso por muy mínimo que sea que garantice, al menos, la fe y testimonio del que solicita el sacramento. Las personas están dispuestas a aceptar las exigencias (la mayoría de veces a regañadientes) para pasar por el escollo que la Iglesia les pone antes de acceder al sacramento. Lo constatamos con los cursillos prebautismales, los cursos para comulgantes o confirmandos y los cursillos prematrimoniales. Esa formación doctrinal a veces reducida al mínimo, no cala la conciencia de las personas y llega a asumirse como parte de ese "papeleo" que se exige para todo. Podemos añadir dias a los cursillos, algún año a la preparación de los confirmandos o comulgantes... lo cierto es que los resultados son magros, demasiado magros como para no plantearnos que algo no funciona, que no es suficiente, que tenemos que ir más allá... En mi opinión, es necesaria una instancia que invite al discernimiento y que por su duración en el tiempo desanime a pedir el sacramento a todos aquellos que desde su libertad no esten dispuestos a asumir lo que significa ser cristiano. Discernir sobre la vida cristiana de cada uno, puede ser complicado en este mundo nuestro tan disperso e individualista, por eso, quizá, la única instancia de discernimiento posible sea la participación en la Eucaristía. Si la eucaristía es el centro y el culmen de la vida cristiana, no deberíamos permitir que nadie acceda al sacramento sin que sea conocido habitualmente por la comunidad en el espacio en que se reúne todas las semanas: La Misa. No sé cuanto tiempo habría que pedir, pero por ejemplo, el mismo libro sacramental del bautismo, habla de dos celebraciones en el proceso de incorporación del bautizado a la comunidad: una primera celebración de presentación y acogida, y otra segunda del bautismo propiamente dicho. Algo así, pienso que podría hacerse con los disitintos sacramentos. Procesos más o menos largos (al menos de un año) en los que las personas asistiendo a la misa dominical, fuesen incorporándose activamente a la comunidad cristiana, incluso mediante pequeñas celebraciones como la presentación de catecúmenos o de novios, la entrega del evangelio, las promesas, etc. etc. ¿Sería esto posible? ¿alguien puede opinar?

viernes, 18 de noviembre de 2011

A vuelta con los sacramentos

 Lc 19,45-48 , Y al entrar al Templo, se puso a echar a los vendedores, [46] diciéndoles: «Está escrito: Mi casa será una casa de oración, pero ustedes la han convertido en una cueva de ladrones». [47] Y diariamente enseñaba en el Templo. Los sumos sacerdotes, los escribas y los más importantes del pueblo, buscaban la forma de matarlo. [48] Pero no sabían cómo hacerlo, porque todo el pueblo lo escuchaba y estaba pendiente de sus palabras. 


El evangelio de hoy me hace repensar la situación que vivimos en las parroquias con el acceso a los sacramentos.  Quizá sea en este momento la mayor fuente de desazón, malestar y problemas relacionales que tenemos los curas en nuestra pastoral.   Porque la situación es de locos: personas que no creen y que sin embargo, piden sacramentos. Desde ahí, es normal que el conflicto se de continuamente.  Hoy me contaba  un compañero que ha tenido un enfrentamiento con una pareja que pedía el bautizo para su hijo un día y una hora determinados e intempestivos, sin atenerse para nada a las disposiciones parroquiales ni a la disposición horaria del cura.  Se le han dado todo tipo de posibilidades para hacerlo en su momento, pero no se han avenido a nada, y de ahí han pasado directamente al insulto personal: que si no haces nada, que si todos los curas sois unos parásitos, que si tu madre.... ahí mi compañero ha dado por finalizada la conversación y se ha ido.   No sin una tristeza profunda en el corazon, que le será difícil superar al menos esta noche. Espero que la oración de esta noche le consuele, yo voy a pedir hoy al Señor por él  Pero esto no es mas que una de las miles de historias que todos los curas nos enfrentamos dia si y dia tambien.   Parejas de novios que pasan olímpicamente de cualquier consideración religiosa, que asisten al cursillo prematrimonial porque no les queda otro remedio, que convierten la boda en un pase de modelitos, un flolclore de músicas, cantos a veces impresentables, a veces de mal gusto... que te piden expresamente que no quieren que dure mucho la misa y que el cura no hable mucho, pero no les importa aguantar una retahila de canciones, jotas, discursos de primos, amigos, invitados.... Si les preguntas si quieren comulgar se miran como diciendo pero qué nos pregunta éste alinígena?...  Y uno que se siente un cura florero, con menos interés y desde luego más barato que el floripondio que adorna el altar...
¿Exagero? no creo.   Y por qué no hablar de los bautizos, cuando se les invita a participar en el curso preparatorio e inmediatamente saltan con las excusas, que si el padre trabaja hasta tarde, que si la madrina vive fuera... y tú que les dices: espero que los padrinos estén confirmados... y ellos que contestan: ¿cómo? ¿qué normas se ha sacado este cura de la manga? ¿qué barbaridad? nos van a hacer perder la fe...   Y yo con la misma cara de incredulidad (dicho vulgarmente: de bobo) que se me quedó en la boda.    Y las confirmaciones para qué hablar, hemos experimentado con los confirmandos de todo:  obligarles a ir a misa, catequesis de 2 ó 3 años, materiales de aquí y de allá, convivencias, excursiones, cine-forums, debates, oracines comunitarias, etc. etc.  Hemos insistido ante los padres y abuelos para que les animen.... Reciben el sacramento... y si te he visto no me acuerdo.
¿Y las primeras comuniones?  No puedo seguir porque me deprimo, me da ansiedad y esta noche se me ha acabado el chocolate ;-).  Me pregunto si no tendríamos que coger como Jesús en el evangelio de hoy, unos buenos correajes y echarlos a todos de la iglesia con unos buenos zurriagazos en el culo para que vayan a celebrar la primera comunión a la Casa de Cultura del pueblo,  allí pueden montar bien el teatro, pero no en la iglesia, que además yo ya estoy viejo para hacer de clown.
Que sí, que hay que tener paciencia, que no hay que apagar el pábilo vacilante, que hay que insistir, ofrecer... que hay que dar la vida si es preciso... de acuerdo,  pero me pregunto ¿no estaremos confundiendo la prudencia con la cobardía?, ¿o la paciencia con la falta de celo? ¿Cómo podremos salir de esta situación?  Desde luego no cada cura por su cuenta y en solitario.  Por eso Vds. Obispos, por favor, tomen nota, hagan algo, esta situación no puede sostenerse más.   Sobre todo porque cada vez estoy más convencido de que manteniéndo las cosas así, le hacemos un flaco favor al evangelio de Jesús.
S.O.S.

jueves, 10 de noviembre de 2011

Dios es humilde

En su blog: Espacio para el Espíritu Juan Jáuregui elabora un precioso artículo sobre la humildad de Dios, que comparto completamente. Tuve una experiencia personal con esta humildad de Dios que me impresionó hace años:
"Hace años, tuve un sueño.... era una época en la que mi soberbia alcanzaba las nubes: cuando pensaba que era mejor que nadie, que era maltratado por mis superiores por no darme lo que yo creia que tenia derecho, cuando veia que otros mucho mas mediocres que yo subían en el escalafón, cuando la amargura se disfrazaba en los entresijos de mi alma de cinismo... un dia soñé, soñé con Dios, le vi como un feto que se empequeñecía y empequeñecía con las palmas de sus manitas dirigidas hacia mi, y al despertar vino a mi conciencia la certidumbre de que Dios es humilde y se aleja de todo lo que es soberbia y orgullo... desde entonces intento empequeñecer mi superyo a ver si El se digna crecer en mi...."

domingo, 22 de mayo de 2011

videoclip 5º domingo de Pascua ciclo A

Spanish revolution?

Meditaba esta semana los Hechos de los Apóstoles con esa exposición de la maravillosa expansión del cristianismo en el primer siglo de nuestra era.  Pedro anunciando en la plaza de Jerusalén y Pablo en la de Antioquía que El Mesías de Dios esperado desde los siglos es Jesus de Nazaret el Crucificado y Resucitado. De como el mensaje mueve los corazones de las gentes, se convierten y empiezan a compartir sus bienes...  Inevitablemente mis pensamientos comparaban esas plazas de Oriente de la actuación de Pedro y Pablo con las plazas que en nuestro pais están viviendo las acampadas de esos jóvenes y no tan jóvenes que piden, entre otras cosas, democracia real ya, y un cambio en el sistema.  ¿Se podría encontrar un paralalelismo entre aquel acontecimiento de hace dos mil años y el de ahora? ¿por qué no? también ahora, se proclama un mensaje humanista (aunque con muchas ambiguedades es cierto), también ahora se expande un espíritu de alegría y ánimo entre los participantes y también ahora se ve como se comparten espacios, palabras, alimentos, ayudas...  Salvando las distancias en todos los órdenes, personalmente me alegro con estas manifestaciones de vida que a todos nos han hecho reflexionar sobre lo que verdaderamente cuenta y que ponen al ser humano por encima de los poderes politicos y económicos
Me preguntaba por mi queria Iglesia, si hemos sido capaces de mantener ese mensaje revolucionario de Jesús, Pedro y Pablo que hacía renacer la esperanza en los más empobrecidos y esclavizados de su tiempo. Y por qué no somo capaces, si no de liderar, si de encontrarnos con esas reivindicaciones de la spanish revolution.  

sábado, 14 de mayo de 2011

Mi pastor

Pastor bueno,
al despertar oigo tu voz de nuevo,
y me pregunto qué me deparará el día,
quizás hoy me deje coger sobre tus hombros,
quizás hoy deje de pensar en otro redil.
Pastor bueno,
cuando no te veo me faltas,
y cuando te veo te ignoro,
y tu voz como un susurro,
que me habla del encuentro incabado,
siempre esperado.
Pastor bueno,
sigo tus huellas, miro tu túnica que toca el suelo,
y a veces pienso que eso es suficiente: los pastos, el aire de la sierra,
el calor de las otras ovejas, su balido unido al mio,
y tu presencia, Pastor bueno, mi Pastor.

lunes, 9 de mayo de 2011

Homilia 4º domingo Pascua ciclo A

              
             Ha comenzado la campaña electoral. Los políticos y los medios de comunicación nos aturden con sus propuestas, que la mayoría de las veces tienen un contenido escaso, dejando el grueso del discurso a denigrar al contrario. Hay un movimiento ciudadano que pretende rechazar esta situación y a estos discursos que tratan a las personas como "ovejas" descerebradas y sin criterio, incapaces de pensar por si mismas.
            Precisamente hoy el evangelio nos habla de ovejas y de un pastor, tan distinto a la mayoría de esos políticos que buscan ante todo sus intereses particulares o de partido, perpetuarse en sus poltronas y vivir a costa del ciudadanos.   El evangelio de hoy nos propone un pastor, Jesucristo, que conoce a cada oveja por su nombre, las guía, las cuida como a las niñas de sus ojos, busca a la perdida y es capaz de dar la vida por sus ovejas. 
             ¡Qué contraste entre el discurso político y el discurso de Jesucristo!.  Entre las promesas de aquellos y las de Este. Ambos piden nuestra adhesión y entrega incondicional, pero sólo el Señor va delante de nosotros y no nos pide nada que antes El no haya realizado y nos haya dado.

videoclip 4º domingo de Pascua ciclo A

lunes, 2 de mayo de 2011

Osama bin Laden

 Estoy viendo en los medios de comunicación el regocijo con el que se ha recibido en todo el mundo la muerte de bin Laden.  Esas multitudes en America echándose a la calle para gritar que "al fin se ha hecho justicia".  Comprendo esa alegría, comprendo que el dolor de las víctimas y sus familias se sienta aliviado por la muerte de ese asesino.   Pero esas manifestaciones de alegría me parecen obscenas.  Después de todo es una vida humana, y no podemos olvidar que la justicia se ha ejercido en una operación militar.  Porque si actuamos así ¿que nos diferencia de los asesinos cuando celebran la muerte de sus víctimas?  los proetarras brindando en los atentados sangrientos o los islamistas celebrando con alegria y quema de banderas americanas la caida de las torres...  ¿Que nos diferencia de todos ellos?  No puede ser el ojo por ojo y el diente por diente.   
A mi personalmente, la muerte de bin Laden me entristece por sus víctimas, por la manera que se ha llevado a cabo y por el fanatismo que puede llevar a unos hombres a convertirse en ese tipo de asesinos despiadados.  Pero ¿alegrarme? eso no puedo...